Pasamos unos días estupendos con el equipo de JuCUM Lima, Brazos Abiertos. En un hermoso lugar en Cieneguilla nos tomamos tiempo para adorar, escuchar enseñanzas, orar unos por otros, jugar, comer buena comida y relajarnos. Agradecido por este tiempo fructífero y por un mayor crecimiento en las relaciones mutuas.